Como respuesta a nuestra petición de ideas para escribir con lápices primos, una familia nos envió un mensaje escrito con tinta invisible y desde entonces iniciamos un juego que nos llevó a la búsqueda de sistemas de escritura para secretos.
Cada día vamos experimentando con uno diferente.
Con zumo de limón que luego necesita del calor para poder leerlo.
Presionando fuerte sobre un papel doble para luego descubrirlo sombreando con un lápiz.
Con cera que luego requiere de una capa de acuarela.
Con bicarbonato o con leche para luego aplicarle calor.
Con todo esto no pretendemos más que conocer formas de escritura y despertar el deseo de escribir por puro placer.